Booklet: Cuentos folklóricos sobre las Damas Fatas

19 / March / 2023 — Compi

El Lobo Blanco El cazador de una villa pasó su vida persiguiendo al lobo blanco, una hermosa criatura que cazaba a las ovejas del pueblo. Una y otra vez intentaba superar a la bestia con armas, con trampas y con magia; sin lograrlo. Era demasiado débil. Al final le rogó a La Dama de los Bosques que le ayude a librar a su villa del terror. Ella aceptó, y en la siguiente noche el cazador esperó el ataque del lobo, confiado de que con la bendición de la Fata podría derrotar a la bestia. El lobo lo despedazó, antes de regresar al bosque para no ser visto nunca mas. Ese dia la villa aprendió que La Cazadora no hace tratos con las presas.

El Disparate del Guerrero Un guerrero de las colinas buscaba la ayuda de las Damas Fatas para derrotar a un demonio de tierras lejanas. Le pidió a La Cazadora por fuerza, y ella le ofreció un hacha a cambio de su ojo. Le pidió a La Tejedora por conocimientos, y ella le ofreció un hechizo a cambio de su hacha. Le pidió a La Buscadora por sabiduría, y ella le ofreció un ojo a cambio de su hechizo. Cuando se enfrentó al demonio, no tenía nada, ya que no había elegido nada para representarlo, y fue prontamente reducido a cenizas.

Digno de la Tumba Un anciano al borde de la muerte le pidió a su hija que lo llevara a La Colina del Ayer, para que lo enterraran entre las raíces del árbol Gulthias. Ella estuvo de acuerdo, pero mientras viajaban se encontró demasiado débil para llevar a su padre mucho mas. Su cuerpo estaba cansado, su comida se había agotado y la noche se oscurecía. Abatida, se volvió hacia el bosque y pidió ayuda a La Cazadora. "¡Por favor, debo llevar a mi padre a la colina! Estoy demasiado débil para cargarlo". Ella suplicó, pero los árboles solo ofrecieron silencio. Fue entonces cuando se dio cuenta de que no era ella la débil, sino su padre, que no podía subir la colina solo. Le cortó la cabeza con el hacha y dejó su cuerpo en la maleza antes de subir la montaña sola.

El Trato de una Araña Un hombre mira sus cultivos enfermos y desea que el clima sea bueno para su cosecha. Una araña negra se arrastra sobre su mano y le dice en susurros que el suelo está seco y contaminado, que ninguna vida puede brotar de él. Ella ofrece una solución, pero exige a cambio el primer fruto de la próxima cosecha. Él acepta con entusiasmo, y ella le dice que la tierra debe ser regada con sangre. El hombre asiente y se desangra sobre el suelo. Cuando sus venas se secan, sangra a su perro, luego a su esposa, luego a su hijo. Unos meses después disfruta de la mejor cosecha en años. Cuando recoge la primera fruta, es el melocotón más perfecto, el más delicioso que jamás haya visto. Incapaz de resistirse, decide morderlo y muere instantáneamente. Una araña sale de su boca.

La Dama del Lago Un niño visita el lago Zarovich para rendir homenaje a La Buscadora, cuando una hermosa mujer sale del agua para saludarlo. Emocionado, el niño le pide a la mujer que le lea su futuro. Ella frunce el ceño, advirtiéndole que a veces es mejor no conocer esas verdades. Él insiste y, con tristeza, la mujer le muestra su futuro en la superficie del lago, que un día provocará la muerte de sus padres. Horrorizado, el joven salta al agua y se ahoga. Unos días después, cuando sus padres se enteran, se ahorcan de pena. La mujer llora, llenando el lago con sus lágrimas.

Señora de los Huesos La Cazadora se arrastra por las montañas y los lechos secos de los ríos en busca de huesos de lobo, y cuando ha reunido un esqueleto completo, los coloca junto al fuego. Se para sobre los huesos, levanta los brazos sobre ellos y comienza a cantar. Los huesos de las costillas y los huesos de las piernas del lobo comienzan a desarrollar carne y luego piel, y La Cazadora canta más y más fuerte a medida que más de la criatura cobra vida. Y La Cazadora sigue cantando tan profundamente que el suelo del bosque tiembla, y mientras ella canta, el lobo abre los ojos, salta y huye valle abajo. En algún lugar de su carrera loca, ya sea por la velocidad de su carrera, o por abrirse paso chapoteando en un río, o por medio de un rayo de luz de luna que le da en los ojos, el lobo se transforma repentinamente en una mujer que ríe y corre libre hacia el horizonte. La Cazadora termina su canto, se vuelve hacia el horizonte y sonríe.

Etiquetas: strahd, strahd-booklet